Más de 300.000 niños crecen en España sin el cuidado y la protección que necesitan. Una situación que pone en grave riesgo su desarrollo emocional, físico y mental y, por tanto, su futuro. Así lo ha puesto de manifiesto Aldeas Infantiles SOS con motivo del Día Universal del Niño, que se celebra este lunes 20 de noviembre. La organización señala que 1 de cada 25 niños están en riesgo de perder el cuidado parental en nuestro país.
El maltrato físico, el psicológico, el abuso sexual y la negligencia entendida como la privación de las necesidades básicas, son los motivos que conducen a la separación de un niño de su núcleo familiar en España. En ese sentido, Aldeas Infantiles SOS recuerda que la orfandad no es la principal causa de que los niños no vivan con sus padres. De hecho, esto solo ocurre en el 1% de los casos a nivel mundial.
Aldeas Infantiles hace esta estimación, que la propia organización califica de “conservadora”, en base a fuentes oficiales recogidas en diversos informes del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. “A día de hoy sabemos que hay 42.628 niños que han perdido el cuidado parental y viven bajo una medida de protección en España, ya sea de acogimiento residencial o familiar. Sin embargo, no existen datos estadísticos precisos sobre los niños en riesgo de perder el cuidado de sus padres”, ha explicado Pedro Puig, presidente de Aldeas.
Por eso, la organización realiza esta estimación con diferentes registros oficiales, combinándolos con los factores de riesgo que conducen a los niños a una situación de vulnerabilidad. La desestructuración familiar, la existencia de violencia entre los padres, el consumo de drogas, la paternidad temprana, la ausencia de habilidades parentales o la carencia de redes sociales y familiares sólidas son algunos de los principales factores que pueden incrementar el riesgo de un niño a perder el cuidado de sus padres. En relación a la pobreza, Aldeas Infantiles SOS aclara que en España la existencia de carencias materiales, aunque se considera un indicador de riesgo, no desemboca en la separación del niño del entorno familiar.
“¿Qué es mejor?”, nueva campaña de Aldeas Infantiles SOS
“¿Qué es mejor? ¿Reñirle o razonar? ¿Campamento o ludoteca? ¿Elegirle la ropa o que la elija él? Para algunos niños lo mejor es algo más básico. Más niños de los que piensas crecen sin el cuidado de sus padres”. Este es el mensaje con el que Aldeas Infantiles SOS quiere sensibilizar a la sociedad española sobre los más de 300.000 niños en riesgo.
Según Pedro Puig, presidente de la organización, “hay muchos niños que lamentablemente no cuentan con nadie que se haga estas preguntas; sus necesidades son mucho más básicas; por eso, como sociedad, debemos ser conscientes de ello y tener siempre presente que lo más importante para un niño es poder crecer en un hogar en el que se sienta querido y protegido”.
Aldeas Infantiles SOS, coincidiendo con el Día Universal del Niño, pone el foco en el derecho de todo niño a seguir siendo niño. “Sabemos por experiencia que los niños que han tenido que separarse de sus familias se han visto obligados a ejercer roles que no correspondían a su edad y a tomar decisiones que deberían corresponder a un adulto; y por eso queremos poner el foco en este tema y ayudarles a que puedan crecer como niños”, ha explicado Pedro Puig.
50 años después, la infancia sigue necesitando protección
Aldeas Infantiles SOS celebra en 2017 sus cincuenta años de trabajo en España, cinco décadas dedicadas a proporcionar un hogar a aquellos niños que no pueden tenerlo y a fortalecer a las familias vulnerables para que puedan cuidar adecuadamente de sus hijos y evitar, así, su posible separación.
“Cuando los padres se enfrentan a realidades complejas puede resultarles muy difícil ofrecer a sus hijos lo que necesitan para crecer. Por eso es tan importante apoyarlas en esos momentos fortaleciendo sus capacidades parentales y ayudándolas a superar la difícil situación en la que se encuentran”, asegura Pedro Puig.
En el último año, Aldeas Infantiles SOS ha atendido a 25.559 niños y jóvenes, y su reto para 2020 es lograr que 35.000 niños crezcan en un ambiente familiar protector. Sin embargo, según señala su presidente, “50 años después, la infancia sigue necesitando protección en nuestro país; somos la decimoquinta economía del mundo y, a pesar de ello, ocupamos el tercer lugar en Europa en pobreza infantil”. La organización nos recuerda que uno de cada tres niños está en riesgo de pobreza o exclusión social en nuestro país; que cada día 37 niños son víctimas del maltrato infantil en el ámbito familiar; y que casi el 40% de los jóvenes está en el paro.
Por todo ello, Aldeas Infantiles SOS reclama de forma urgente:
1. Una serie de medidas que garanticen el bienestar de los niños que forman parte del sistema de protección y prevención en nuestro país:
- Elección de la mejor alternativa de cuidado adecuándolo a la situación específica de cada niño.
- Procurar la no separación de hermanos ante una medida de desamparo.
- Equipos terapéuticos especializados en el diagnóstico y tratamiento de los efectos derivados del maltrato en la infancia.
- Incremento de las ayudas vinculadas a la mejora del rendimiento escolar.
- Homogeneizar el acceso a los recursos de Servicios Sociales en las zonas urbanas y rurales.
- Desarrollar un sistema de prevención que detecte las necesidades de las familias y facilite el desarrollo de planes de trabajo integrales.
- Incrementar el apoyo y el acompañamiento a los jóvenes cuando abandonan el sistema de protección.
- Solo así los menores más vulnerables serán tenidos en cuenta y sus realidades podrán ser abordadas a través de políticas y de la acción directa.
- Adopción de métodos de recopilación de datos capaces de evaluar a los niños más vulnerables.
Asimismo, Aldeas Infantiles SOS, junto al resto de organizaciones integrantes de la Plataforma de Infancia, insta al Gobierno a:
- Elaborar un nuevo Plan Estratégico Nacional de Infancia y Adolescencia (PENIA)
- Un Pacto de Estado por la Infancia
- Identificación de las partidas destinadas a la infancia en los Presupuestos Generales del Estado.
- Presupuestos específicos que garanticen el cumplimiento de la Ley de Protección Jurídica del Menor.
- Aumento progresivo de la inversión real dedicada a la infancia, del 1,3% del PIB aproximado actual, al 2,4% del PIB de la media de la Unión Europea.
- Creación de un fondo social de reserva que garantice la inversión en infancia, más allá de las situaciones de crisis.
- Voluntad de establecer un Pacto de Estado por la Infancia consensuado con las organizaciones de infancia.
- Reducción de la pobreza y exclusión infantil
- Incremento de la prestación por hijo a cargo hasta los 1.200€ anuales y ampliación de los umbrales de familias que perciben esta prestación. Actualmente la prestación es de 291€ anuales (24,25€ mensuales).
- Incrementar la dotación actual del Fondo Extraordinario para combatir la pobreza infantil.
- Recomendamos la elaboración de un Plan Nacional de Lucha contra la Pobreza Infantil que establezca un marco coherente contra la exclusión, con objetivos e indicadores específicos y medibles, y con el suficiente respaldo económico.
- Compromiso con los derechos de la infancia
- Garantizar el derecho de los niños a ser escuchados y a participar a través de canales reales y estables en las decisiones, planes y leyes que les afectan, especialmente en el Plan Estratégico Nacional de Infancia y Adolescencia.
- Elaboración de una Estrategia Integral de Lucha contra la Violencia contra la Infancia articulada en torno a una Ley Orgánica que implique a las Administraciones y que plantee medidas de prevención, detección, intervención y restauración.