Los arrestados conformaban dos grupos criminales independientes, entre los cuales se encontraban especialistas en el robo con butrón o la apertura de cajas fuertes, que se habían asociado para cometer este hecho delictivo
Ambos grupos se habían puesto en contacto a través de un ciudadano español de origen colombiano, el cabecilla de la operación, quien además les facilitaría la información necesaria para ejecutar el robo