‘Soludable’ crea una guía que recoge recomendaciones y consejos a tener en cuenta a la hora de tomar el sol

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En la época estival y con las visitas frecuentes a la playa, piscinas o actividades que se realizan en el exterior, la exposición solar aumenta considerablemente. Aunque existen numerosos beneficios de la exposición al sol, si no se realiza de forma adecuada, esta acción conlleva una serie de riesgos para la salud. Este es el punto de partida del ‘Decálogo de Soludable’, que es una guía con recomendaciones sencillas a tener en cuenta a la hora de realizar actividades en el exterior, ir a la playa o la piscina.

Como ya se ha comentado, la radiación ultravioleta en pequeñas dosis es saludable y tiene enormes beneficios para la salud, tanto para el cuerpo como para la mente. Sin ir más lejos, ayuda a sintetizar la vitamina D, responsable del metabolismo del calcio y mineralización de los huesos, y tiene efectos positivos en la serotonina y endorfina, neurotransmisores de la felicidad. Por el contrario, en grandes cantidades, este tipo de radiación puede dañar la piel, los ojos y el sistema inmune. Otras consecuencias son las quemaduras solares o los golpes de calor, que provocan efectos a largo plazo, como es un envejecimiento acelerado de la piel, el desarrollo de cáncer de piel y cataratas. En la estación estival, los rayos solares provocan un daño mayor para la salud, ya que su incidencia sobre la Tierra se produce de forma más directa.

Existe distintos valores dentro del índice ultravioleta (UVI), que es una medida implantada por la Organización Mundial de la Salud que informa sobre el riesgo de irradiación solar y el tipo de protección que se debe adoptar en cada nivel. El índice tiene un valor mínimo de 0 y no tiene un valor máximo. Este índice estándar permite emitir predicciones de UVI comparables en todo el mundo. Los colores utilizados son el verde para UVI bajo (entre 0 y 2), el amarillo para UVI moderado (entre 3 y 5), el naranja con un riesgo alto (entre 6 y 7), el rojo para UVI muy alto (entre 8 y 10) y el morado para UVI extremo (superior a 11). Dependiendo del valor del UVI, debemos tomar las medidas adecuadas de protección frente a las radiaciones UV. En términos generales, a partir de un valor de 3, debemos iniciarse las medidas de protección solar, y por encima de 7 habrán de extremarse.

También existen grupos de riesgo, como son niños y adolescentes; personas con la piel clara, pecas, lunares o que hayan padecido cáncer de piel o bien con una historia familiar de melanoma; personas cuya estancia o periodo vacacional tenga lugar en lugares de gran altitud, tropicales o subtropicales; trabajadores que desempeñen su tarea en el exterior; enfermos que padecen afecciones autoinmunes; personas que han recibido un trasplante; pacientes que están en tratamiento con medicamentos que debilitan el sistema inmune o que causan que su piel sea más sensibles, o pacientes que padecen alguna enfermedad que debilita el sistema inmunitario.

El decálogo recomienda evitar el uso de cabinas de bronceado artificial porque su uso incrementa el riesgo de melanoma, especialmente en personas jóvenes; reducir la exposición solar entre las 12.00 a las 16.00 horas, ya que al mediodía los rayos del sol inciden más verticalmente y el riesgo de daño solar es mayor; durante estas horas, se recomienda permanecer bajo la sombra; cubrir la cabeza y el cuerpo con sombrero, gafas de sol homologadas y ropa adecuada. Es importante aplicar de forma frecuente cremas solares con un factor superior a 15 y amplio espectro, teniendo en cuenta el tipo de piel; beber agua para evitar la deshidratación y aumentar el consumo de frutas y verduras, ya que son antioxidantes naturales. Se debe consultar el índice UVI y aplicar la protección que mejor se ajuste, teniendo en cuenta que no hay que bajar la guardia en los días nublados; tener conocimiento del fototipo cutáneo para saber el riesgo que se asume en la exposición solar y las medidas que se deben tomar. El decálogo recuerda la importancia de proteger de forma adecuada a los menores, siempre con la cabeza cubierta y gafas solares cuando estén en el exterior, además de aplicar cremas solares con un factor por encima de 30, teniendo en cuenta la edad. Por último, examinar regularmente la piel y realizar chequeos, prestando una atención especial a los lunares para estar alerta ante cualquier cambio.

Es recomendable consultar la página web de Soludable y los perfiles de redes sociales para recibir la información actualizada sobre la mejor manera de protegerse de la exposición solar. Además, en algunas playas de la costa ya se pueden consultar los “solmáforos” o dispositivos que informan a los bañistas sobre el nivel de irradiación solar y qué medidas fotoprotectoras deben tener en cuenta.