La inflación anual estimada del IPC en agosto de 2022 es del 10,4%, de acuerdo con el indicador adelantado elaborado por el INE. Este indicador proporciona un avance del IPC que, en caso de confirmarse, supondría una disminución de cuatro décimas en su tasa anual, ya que en el mes de julio esta variación fue del 10,8%. Esta evolución es debida, principalmente, a la bajada de los precios de carburantes, que subieron en agosto de 2021, y, en menor medida, al descenso de los combustibles líquidos, mayor que el registrado el año anterior. En sentido contrario, destaca el aumento de los precios, entre otros, de la electricidad, alimentación, restauración y paquetes turísticos. La tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) aumenta tres décimas, hasta el 6,4%. De confirmarse, sería la más alta desde enero de 1993.