El Colegio de Abogados de Málaga ha firmado un acuerdo con el Banco Santander para facilitar a los clientes el pago fraccionado de las minutas. De este modo, la entidad financiera pone a disposición del Colegio y de los colegiados la posibilidad de contratar en condiciones preferentes el servicio de TPV (Terminal Punto de Venta) virtual de Santander Elavon, que permite ofrecer a los clientes, entre otras funcionalidades, el fraccionamiento del pago de las facturas correspondientes a los servicios prestados.
“Con esta herramienta conseguimos que los clientes tengan más opciones para abonar las minutas. A ellos les resultará más cómodo pagar de manera fraccionada y los abogados estarán menos expuestos a posibles impagos, de modo que el servicio es completo y beneficioso para todas las partes”, ha explicado el decano del Colegio malagueño, Francisco Javier Lara, quien ha presentado el servicio en la Delegación del Colegio en Marbella junto a Marisol Almodóvar, directora territorial de Negocio Adquirente de Santander Elavon Merchant Services, y Aurora Martínez, responsable de Instituciones del Santander en Almería, Málaga y Melilla.
El Banco Santander proporcionará a los letrados interesados una plataforma que ofrece soporte telefónico, así como formación a los usuarios y herramientas que permiten análisis y generación de informes.
El sistema planifica los pagos recurrentes, las suscripciones y los pagos a plazos de los clientes. En caso de que proceda de otros países, se les ofrece además la posibilidad de pagar en su propia moneda.
El Colegio y el Banco Santander han organizado tres charlas para dar a conocer el funcionamiento del sistema. Las dos primeras han tenido lugar en la sede del Colegio en la capital –hace unos días– y en la Delegación de Marbella –hoy jueves–. Mañana viernes se desarrollará la tercera y última en la Delegación del Colegio en Vélez-Málaga.
Este acuerdo es una extensión del convenio marco de colaboración suscrito con anterioridad entre el Colegio de Abogados de Málaga y el Banco Santander, por el que los colegiados pueden acceder a una serie de ofertas de productos y servicios financieros con condiciones especiales, dirigidos especialmente a los profesionales de la Justicia, entre los que se encuentra una aplicación informática desarrollada con la colaboración del Ministerio de Justicia.
Gracias a este mismo sistema, el Colegio de Abogados podrá ofrecer a los colegiados el pago fraccionado de los cursos y jornadas de formación que organice.